Eduardo Muñoz Lora, un maestro del Barniz de Pasto: una técnica artesanal utilizada para crear arte

La primera vez que vimos una obra de Eduardo fue ya hace 30 años en la Galería Cano de Bogotá: una escultura de la Ñapanga, una mestiza en su traje rural de Pasto con su hijo envuelto en un chal a la espalda, decorada en la técnica del Barniz de Pasto. Quedamos fascinados por la belleza de esta obra y quisimos conocer a Eduardo Muñoz Lora. Sin embargo, nadie pudo ayudarnos con la dirección de su casa, y sólo pudimos averiguar que Eduardo vivía en Pasto.

Nos arriesgamos y volamos a Pasto para buscarlo allí. Nos ayudaron rápidamente con su dirección y le visitamos en su casa. Eduardo y su esposa Graciela nos acogieron con cariño y nos mostraron en su taller cómo se utiliza la materia prima -la resina  del árbol de mopa-mopa- para fabricar las finísimas láminas de colores ("telas"),  que después se colocaran  en objetos de madera de cedro (esculturas, ánforas, etc.) y se recortan con un cuchillo. La magia especial de esta manualidad es que se "dibuja con el cuchillo". Así, cada detalle de los objetos no está pintado, sino que se forma con cortes de cuchillo.

En esa ocasión compramos una pieza que nos pareció muy bonita para llevárnosla a Alemania.

En los años siguientes, lo visitamos una y otra vez en Pasto. Y cada vez nos emocionamos de nuevo con su trabajo.

En 1995, Eduardo nos invitó a una exposición de su obra en Mainz (Alemania). Allí también dictó talleres sobre la técnica de la mopa-mopa para la Cámara de Artesanía de Mainz en colaboración con Artesanías de Colombia. Eduardo ya había organizado talleres de este tipo en varias grandes ciudades del mundo (Tokio, Londres, etc.). Al final de la exposición, compramos algunas obras más de Eduardo.

Las obras de Eduardo me habían impresionado tanto que también las incluí en dos calendarios de arte que publiqué con obras de artistas colombianos:

En el calendario Arte Colombiano 2011, página del calendario de marzo.
Título: "Danzante", Barniz de Pasto sobre madera con lienzo, 75x55 cm.

En el calendario Arte Colombiano 2017 en la página del calendario diciembre.
Título: "Los amantes del Guaitara II, Leyenda de la mitología de Nariño", Barniz de Pasto sobre madera y lienzo 75x55 cm.

En 2019, fuimos con Eduardo al Putumayo en Sibundoy a visitar a los indígenas Kampsá. A ellos les compramos dos taburetes aserrados de un tronco de árbol, que Eduardo quiso decorar con su técnica artesanal.

Lamentablemente, no pudimos encontrarnos con Eduardo en nuestra última visita a Colombia en enero de 2022. Eduardo estaba pasando por una tragedia familiar, sin embargo, a petición de Carmen, mi esposa, y con motivo de mi cumpleaños decoró una botella de ron de la Empresa Dictador que el maestro ronero Hernán Parra envió a Eduardo. El maestro no decora botellas pero en esta ocasión hizo una excepción y además me regaló la decoración. Un gesto muy generoso de su parte que nos ha conmovido.

 

Barniz de Pasto o Mopa Mopa
Una técnica   artesanal ancestral única en el mundo

La técnica de Barniz de Pasto fue inscrita por la UNESCO en 2020 en la lista de patrimonio cultural inmaterial que requiere preservación urgente. Este nombramiento ha sido un gran acierto y un éxito para los artesanos en Pasto.

La materia prima  (una resina cauchosa como una bolita ) se obtiene de los brotes  del árbol mopa mopa. En la selva del Putumayo, estos brotes son cosechados  por expertos recolectores  en un determinado estado de madurez y en ciertos meses del año. La masa resinosa ya era utilizada por las culturas indígenas prehispánicas como pegante y como aislante para sellar recipientes. El humo de esta resina también era utilizado por los pueblos indígenas para actos rituales.

Durante la colonia esta técnica tuvo un apogeo y era reconocida y apreciada en toda América y en España.

Los artesanos compran esta materia prima y la moldean   en un dispendioso proceso. Primero se hierve la masa compacta, con el calor se va soltando la masa, después se golpea con un martillo en un yunque, se muele en un molino doméstico, se vuelve a hervir y se colorea con tintes naturales (por ejemplo, achiote). Al final del proceso de producción, dos personas frente a frente van estirando la masa ya flexible quedando como una fina tela. Para el estiramiento utilizan las manos y la boca.

Estas hojas teñidas se aplican a objetos de madera de cedro. En Nariño hay talleres de carpintería y tornado especializado exclusivamente en la fabricación de cajas de madera, bomboneras, cofres, ánforas y esculturas que serán decoradas con esta técnica.

El artesano aplica su lámina a estos objetos, que se adhiere inmediatamente a la madera. La decoración deseada (por ejemplo, motivos florales, precolombinos, coloniales ) se recorta ("dibuja") con un bisturí y el material que sobra se retira a mano.

La técnica de Barniz de Pasto abre una amplia gama de productos al amante de la artesanía colombiana o del arte colombiano:

Se decoran desde objetos sencillos como pequeñas cajas, portavasos y platos de madera, hasta "grandes obras de arte". Son esculturas realizadas en madera de cedro por escultores de madera y luego decoradas por un maestro de la técnica del Barniz de Pasto. Por supuesto, el artista también es responsable del diseño de las esculturas por parte del escultor de madera, al que hace exigencias concretas en el diseño.

Un viaje a Pasto siempre merece la pena, no sólo por la belleza de los paisajes de la región, sino también por su tradición artesanal única y ancestral.

Aquí puede ver el video de Eduardo, ” El Barniz de Pasto de Eduardo Muñoz Lora y aquí puede leer su biografía.